viernes, 6 de septiembre de 2019

Cómo conseguir inspiración en tu trabajo (5 pasos para lograrlo)

Cada profesional tiene su estilo propio de abordar la carrera que ejerce, pero también es cierto que algunas profesiones requieren de un poco más de inspiración que otras. Por ejemplo, las carreras afines con el arte (de diversos tipos) requieren más que ganas de trabajar y tener un resultado, porque en ocasiones ni el mismo profesional tiene una visión 100% clara acerca de ese resultado que espera.

Esto a veces puede ser un problema para ellos porque a pesar de querer ser productivos, en ocasiones pueden sufrir de bloqueos o no lograr “eso” que están buscando, que muchas veces no sabemos ni de qué se trata. Como el arte es subjetivo, y como también muchas profesiones tienen su arte a pesar de ser percibidas por los ajenos como cuadradas, es importante no atascarnos en ese punto específico de ellas, para que podamos ser tan productivos como lo deseamos. Según Gananci, una de las cualidades más importantes para alcanzar el éxito que nos hemos propuesto es la de dejar de lado las excusas y poner manos a la obra, incluso cuando sintamos que la inspiración nos ha abandonado y nos sintamos perdidos sin ella.

Con respecto a este tema, una de mis frases favoritas es “que la inspiración te agarre trabajando” porque si bien es cierto que en ocasiones es absolutamente necesaria, tampoco ganamos nada quedándonos de brazos cruzados.

La inspiración no se puede forzar, pero al ser profesional en tu carrera, sabrás que hay pasos que puedes dar en pro de obtener un resultado que te agrade. Quizá no será óptimo tomando en cuenta tus cualidades, o algo de lo que estés absolutamente orgulloso, pero sí habrás sido productivo y tendrás la capacidad de modificarlo sobre la marcha o más adelante.

Si tú eres de los que se frustran cuando no tienen la inspiración necesaria para trabajar en sus proyectos que pueden ser de escritura, distintos tipos de diseño, pintura, música, entre otros, pero a la vez quieres ser productivo, mira las siguientes claves que te ayudarán a lograrlo:

1.- Anota todas tus ideas: muchas veces me pasa que, al momento de sentarme a escribir, simplemente no doy con un tema que considere lo suficientemente bueno. Esto me hace pasar mucho más tiempo considerando distintas opciones y frustrándome cada vez más cuando nada termina de convencerme mientras el tiempo pasa.

Una manera que conseguí para evitar esto, es siempre anotar las ideas que se me ocurren en diversos momentos del día, sin importar lo que esté haciendo. Porque la inspiración es así, llega sin avisar y debes estar preparado para tomar así sea una parte de ella inmortalizándola en papel o en las notas escritas/de voz de tu teléfono. Puedo decir por experiencia propia que en otra ocasión, esas ideas pueden ser de gran ayuda para ti cuando te sientas “bloqueado”.

2.- Observa exponentes que admires: otra de las maneras para no perder el tiempo en aquellos momentos donde no estás trabajando de lleno porque la musa ha decidido no aparecer, es viendo exponentes de tu área a los que admires o incluso trabajos pasados tuyos que te agraden los suficiente como para recordarte lo bueno que eres en lo que haces.

Ver éxitos de otras personas y/o propias son un estímulo poderoso para volver al trabajo incluso cuando todavía no tengas en mente una meta del todo definida. Pero de eso no debes

preocuparte, una vez en el camino lo más probable es que la visión se aclare conforme vas a acercándote.

3.- Establece horarios de trabajo: esto no es con el fin de ser estrictos, sino para poder aumentar tus probabilidades de rendimiento. Es preferible que establezcas una hora para comenzar a trabajar todos los días, así te irás adaptando a producir incluso cuando no te sientas en tu mejor momento.

Otra recomendación importante es que te fijes en la hora en la que suelen llegarte las mejores ideas o te sientes más inspirado. Si le prestas atención a esto, establecerás un horario que te convenga porque es tácito decir que trabajamos mucho mejor cuando la motivación está a tope.

Esto es lo bueno de trabajar de forma independiente, puedes elegir tus horarios de forma que vayan de la mano con esos momentos en los que mejor funcionas. Por ejemplo, hay personas que de madrugada son increíbles produciendo, mientras que otros trabajan mejor en plena luz del día.

4.- Procura un ambiente óptimo: otra de las formas que pueden ayudarte a conseguir la inspiración necesaria, es contar con un área de trabajo donde te sientas a gusto. influye la iluminación, la temperatura, el ruido, la privacidad, entre otros.

Tener un espacio con estas características puede aumentar tu productividad sustancialmente, a diferencia de cuando debes trabajar en condiciones que no son las mejores, lo que espanta a tu musa.

5.- Considérate capaz: este es un punto extremadamente importante porque cuando sientes que no vas a poder hacer algo, de verdad no podrás hacerlo. Si un día no te sientes apto (por razones que no son reales, sino que solo están en tu mente) para ser productivo, lo más probable es que no lo seas, pero si crees lo contrario y te esfuerzas, obtendrás tus resultados.

Nuestra mente es muy poderosa porque en ella se gestan nuestras acciones. Si crees que la tuya no te impulsa, sino que más bien te frena o se convierte en un obstáculo, aprende cómo tener una mentalidad ganadora que te ayude a superar los obstáculos que se te presentan y aquellos que tú mismo te colocas.

Por otro lado, muchos artistas renombrados, famosos y cuyas obras son ampliamente reconocidas, pueden tener la reputación de ser un tanto afligidos o funcionar mejor bajo situaciones difíciles. Esto quiere decir que ellos tomaron esas situaciones como inspiración y motor, en vez de encerrarse en ellas como excusas. Esa es otra estrategia que podría funcionarte.

 

 

 

 

Profesionalismo ?!

En mi último empleo me pidieron “profesionalismo” Me pidieron profesionalismo para seguir trabajando 10 horas diarias (mínimo). Sin pago extra. Me pidieron profesionalismo para ingresar a la planta ni un minuto después de mi hora de entrada, pero sin hora de salida. Me pidieron profesionalismo para “tratar bien al personal” cuando a mi y otros compañeros nos gritaban, trataban con malos modos y nunca se valoraban los logros. Me pidieron profesionalismo al realizar mi trabajo con base en los lineamientos y procedimientos, cuando estos no estaban actualizados, no reflejaban el trabajo real ni las indicaciones mínimas para obtener los resultados que ellos deseaban. Me pidieron profesionalismo al investigar por mi mismo cómo funcionaban procesos, instrumentos o como se organizaba el historial auditable de los productos, porque los superiores “ya no se acordaban” o “porque se dejó pendiente”. Tuve que renunciar cuando descubrí que eso que pedían no era profesionalismo, sino sumisión. Es realmente grave que las personas confundan ser completamente sumiso a tener condiciones adversas de trabajo “ponerse la camiseta” y ser profesional. Tal vez es un asunto generacional, pero en verdad esto tiene que cambiar.