Cada profesional tiene su estilo propio de abordar la carrera que
ejerce, pero también es cierto que algunas profesiones requieren de un
poco más de inspiración que otras. Por ejemplo, las carreras afines con
el arte (de diversos tipos) requieren más que ganas de trabajar y tener
un resultado, porque en ocasiones ni el mismo profesional tiene una
visión 100% clara acerca de ese resultado que espera.
Esto a veces puede ser un problema para ellos porque a pesar de
querer ser productivos, en ocasiones pueden sufrir de bloqueos o no
lograr “eso” que están buscando, que muchas veces no sabemos ni de qué
se trata. Como el arte es subjetivo, y como también muchas profesiones
tienen su arte a pesar de ser percibidas por los ajenos como cuadradas,
es importante no atascarnos en ese punto específico de ellas, para que
podamos ser tan productivos como lo deseamos. Según Gananci, una de las
cualidades más importantes para alcanzar el éxito que nos hemos
propuesto es la de dejar de lado las excusas y poner manos a la obra,
incluso cuando sintamos que la inspiración nos ha abandonado y nos
sintamos perdidos sin ella.
Con respecto a este tema, una de mis frases favoritas es “que la
inspiración te agarre trabajando” porque si bien es cierto que en
ocasiones es absolutamente necesaria, tampoco ganamos nada quedándonos
de brazos cruzados.
La inspiración no se puede forzar, pero al ser profesional en tu
carrera, sabrás que hay pasos que puedes dar en pro de obtener un
resultado que te agrade. Quizá no será óptimo tomando en cuenta tus
cualidades, o algo de lo que estés absolutamente orgulloso, pero sí
habrás sido productivo y tendrás la capacidad de modificarlo sobre la
marcha o más adelante.
Si tú eres de los que se frustran cuando no tienen la inspiración
necesaria para trabajar en sus proyectos que pueden ser de escritura,
distintos tipos de diseño, pintura, música, entre otros, pero a la vez
quieres ser productivo, mira las siguientes claves que te ayudarán a
lograrlo:
1.- Anota todas tus ideas: muchas veces me pasa
que, al momento de sentarme a escribir, simplemente no doy con un tema
que considere lo suficientemente bueno. Esto me hace pasar mucho más
tiempo considerando distintas opciones y frustrándome cada vez más
cuando nada termina de convencerme mientras el tiempo pasa.
Una manera que conseguí para evitar esto, es siempre anotar las
ideas que se me ocurren en diversos momentos del día, sin importar lo
que esté haciendo. Porque la inspiración es así, llega sin avisar y
debes estar preparado para tomar así sea una parte de ella
inmortalizándola en papel o en las notas escritas/de voz de tu teléfono.
Puedo decir por experiencia propia que en otra ocasión, esas ideas
pueden ser de gran ayuda para ti cuando te sientas “bloqueado”.
2.- Observa exponentes que admires: otra de las
maneras para no perder el tiempo en aquellos momentos donde no estás
trabajando de lleno porque la musa ha decidido no aparecer, es viendo
exponentes de tu área a los que admires o incluso trabajos pasados tuyos
que te agraden los suficiente como para recordarte lo bueno que eres en
lo que haces.
Ver éxitos de otras personas y/o propias son un estímulo poderoso
para volver al trabajo incluso cuando todavía no tengas en mente una
meta del todo definida. Pero de eso no debes
preocuparte, una vez en el camino lo más probable es que la visión se aclare conforme vas a acercándote.
3.- Establece horarios de trabajo: esto no es con
el fin de ser estrictos, sino para poder aumentar tus probabilidades de
rendimiento. Es preferible que establezcas una hora para comenzar a
trabajar todos los días, así te irás adaptando a producir incluso cuando
no te sientas en tu mejor momento.
Otra recomendación importante es que te fijes en la hora en la que
suelen llegarte las mejores ideas o te sientes más inspirado. Si le
prestas atención a esto, establecerás un horario que te convenga porque
es tácito decir que trabajamos mucho mejor cuando la motivación está a
tope.
Esto es lo bueno de trabajar de forma independiente, puedes elegir
tus horarios de forma que vayan de la mano con esos momentos en los que
mejor funcionas. Por ejemplo, hay personas que de madrugada son
increíbles produciendo, mientras que otros trabajan mejor en plena luz
del día.
4.- Procura un ambiente óptimo: otra de las formas
que pueden ayudarte a conseguir la inspiración necesaria, es contar con
un área de trabajo donde te sientas a gusto. influye la iluminación, la
temperatura, el ruido, la privacidad, entre otros.
Tener un espacio con estas características puede aumentar tu
productividad sustancialmente, a diferencia de cuando debes trabajar en
condiciones que no son las mejores, lo que espanta a tu musa.
5.- Considérate capaz: este es un punto
extremadamente importante porque cuando sientes que no vas a poder hacer
algo, de verdad no podrás hacerlo. Si un día no te sientes apto (por
razones que no son reales, sino que solo están en tu mente) para ser
productivo, lo más probable es que no lo seas, pero si crees lo
contrario y te esfuerzas, obtendrás tus resultados.
Nuestra mente es muy poderosa porque en ella se gestan nuestras
acciones. Si crees que la tuya no te impulsa, sino que más bien te frena
o se convierte en un obstáculo, aprende cómo tener una mentalidad ganadora que te ayude a superar los obstáculos que se te presentan y aquellos que tú mismo te colocas.
Por otro lado, muchos artistas renombrados, famosos y cuyas obras
son ampliamente reconocidas, pueden tener la reputación de ser un tanto
afligidos o funcionar mejor bajo situaciones difíciles. Esto quiere
decir que ellos tomaron esas situaciones como inspiración y motor, en
vez de encerrarse en ellas como excusas. Esa es otra estrategia que
podría funcionarte.